Los dueños de perros a menudo se enfrentan al reto de lidiar con comportamientos indeseados, y uno de los más comunes es que su perro mendigue en la mesa. Puede ser frustrante disfrutar de una comida mientras tu amigo peludo te mira fijamente, te roza la pierna con la pata o incluso lloriquea pidiendo un poco de comida. Afortunadamente, con un entrenamiento y estrategias de manejo constantes, puedes desalentar eficazmente este comportamiento y crear una experiencia gastronómica más tranquila para todos.
🐾 Entendiendo por qué los perros mendigan
Antes de profundizar en las soluciones, conviene comprender por qué los perros piden. Suplicar suele ser un comportamiento aprendido. Una sola vez que ceda a esas miradas de cachorro puede reforzar el comportamiento, enseñándole a tu perro que pedir puede ser gratificante.
Los perros comen de forma oportunista y se sienten atraídos por los atractivos olores y sabores de la comida humana. Aprenden rápidamente que estar cerca de la mesa aumenta sus posibilidades de recibir un premio sabroso. Esto es especialmente cierto si los miembros de la familia tienen reglas inconsistentes.
Técnicas de entrenamiento para dejar de mendigar
Un entrenamiento eficaz es crucial para evitar que tu perro mendigue. Las siguientes técnicas pueden ayudar a establecer límites claros y desalentar comportamientos indeseados:
Comando « Déjalo»
La orden «Déjalo» es una herramienta versátil para evitar que sugiera. Le enseña a tu perro a ignorar los objetos tentadores, como la comida de la mesa. Empieza colocando una golosina en el suelo y cubriéndola con la mano.
Cuando tu perro intente alcanzar la golosina, dile con firmeza: «¡Déjala!». Una vez que deje de intentarlo, prémialo con una golosina diferente que tengas en la otra mano. Aumenta gradualmente la dificultad usando objetos más atractivos y colocándolos más cerca de tu perro.
Comando «Ve a tu lugar»
Designa un lugar específico para tu perro durante las comidas, como una cama o una colchoneta en otra parte de la habitación. Enséñale a ir a su sitio cuando se lo ordenes y prémialo por quedarse allí. Esto le proporciona una conducta alternativa clara y lo mantiene alejado de la mesa.
Empieza por atraer a tu perro a su lugar designado con una golosina. Una vez que esté en su sitio, elógialo y dale la golosina. Aumenta gradualmente el tiempo que necesita permanecer en su sitio, usando refuerzo positivo para animarlo.
🚫 Ignorar el comportamiento de mendicidad
Una de las maneras más efectivas de disuadir la mendicidad es ignorarla por completo. Evite el contacto visual, las respuestas verbales o cualquier tipo de atención cuando su perro esté mendigando. Cualquier atención, incluso negativa como regañarlo, puede reforzar el comportamiento.
Es importante ser constante con este enfoque. Si a veces cedes y otras ignoras sus súplicas, solo confundirás a tu perro y harás que sea más difícil eliminar el comportamiento.
Estrategias de gestión para la hora de comer
Además de la capacitación, es fundamental implementar estrategias de gestión eficaces para prevenir la mendicidad. Estas estrategias se centran en controlar el entorno y prevenir las oportunidades de mendicidad:
🔒 Mantenga los alimentos fuera del alcance
Nunca deje comida desatendida en la mesa o encimeras, donde su perro pueda acceder fácilmente. Esto elimina la tentación de robar comida y refuerza la idea de que la comida humana no es para ellos.
Limpie inmediatamente cualquier derrame o migaja para evitar que su perro hurgue. Un entorno limpio minimiza las posibilidades de que asocie el comedor con restos de comida.
⏰ Alimenta a tu perro antes de comer
Darle de comer a tu perro antes de sentarte a comer puede reducir su interés. Un perro saciado tiene menos probabilidades de estar motivado a pedir comida. Asegúrate de que reciba una comida nutritiva y satisfactoria.
Considere usar un comedero de rompecabezas o un tazón de alimentación lenta para que su comida sea más atractiva y estimulante mentalmente. Esto puede reducir aún más su aburrimiento y sus ganas de pedir.
🚪 Separe a su perro durante las comidas
Si el entrenamiento y otras estrategias de manejo no son suficientes, considere separar a su perro del comedor durante las comidas. Esto podría implicar colocarlo en otra habitación o usar una jaula.
Dales un juguete para morder o un rompecabezas para que se entretengan mientras comes. Esto les ayuda a asociar la separación con experiencias positivas.
⚖️ La constancia es clave
La constancia es fundamental para evitar que tu perro mendigue. Todos en casa deben seguir las mismas reglas y métodos de entrenamiento. La inconsistencia solo confundirá a tu perro y dificultará que deje de mendigar.
Informe a sus invitados sobre sus normas respecto a alimentar a su perro desde la mesa. Pídales amablemente que se abstengan de darle comida, incluso si insisten. Explíqueles cómo una sola vez puede reforzar el comportamiento.
🩺 Cuándo buscar ayuda profesional
Si le cuesta evitar que su perro mendigue a pesar de implementar estas estrategias, considere buscar ayuda profesional de un adiestrador o conductista canino certificado. Este profesional podrá evaluar el comportamiento específico de su perro y desarrollar un plan de entrenamiento personalizado.
Un profesional también puede ayudar a identificar cualquier problema subyacente que pueda estar contribuyendo a la mendicidad, como la ansiedad o el aburrimiento. Puede brindar orientación para abordar estos problemas y mejorar el bienestar general de su perro.